Una obra maestra que captura la esencia de la elegancia atemporal. Este par de pendientes de diamantes están diseñados para la mujer moderna que aprecia la belleza y la sofisticación. Unos pendientes de aro que son el complemento perfecto para cualquier ocasión, desde una cena íntima hasta una celebración grandiosa.

Pendientes de zafiros con lágrimas engastados en garras sobre oro blanco de 18 quilates. Está compuesto por tres piezas con movimiento que destacan dos zafiros talla pera con extra de brillo que aportan sus dobles orlas de diamantes. Alto: 3,3 cm Ancho: 1,0 cm